El involucramiento en el territorio y las comunidades, el trabajo de proyectos relacionados a temas esenciales a nivel país y regional y la promoción de una cultura descentralizada son algunos de los puntos más importantes según Álvaro Rojas, rector de la Universidad de Talca, para el desarrollo de las regiones, el cual cada vez se potencia más a través de las instituciones universitarias.
Sin dudas las universidades regionales se han posicionado como un motor de desarrollo tanto para las comunidades locales como para el país. Durante los últimos años, se han ido sumando mayores desafíos relacionados a temas que son prioritarios a nivel local como la migración, cambio climático, desarrollo tecnológico, innovación, entre otros.
En este contexto, en conversación con Álvaro Rojas, rectos de la Universidad de Talca, sobre el rol de la academia y el desarrollo que ha tenido en la creación de proyectos vinculados a estas temáticas como en la formación de capital humano capacitado para trabajar en diferentes ámbitos.
Actualmente, la Universidad de Talca es la mejor universidad estatal de regionales según el Ranking de Universidades de América Economía y forma parte grupo de Universidades complejas del país con una acreditación de seis años en todas las áreas.
Según Rojas, uno de los aspectos más relevantes en la formación de capital humano en regiones, además de tener cursos que promueven la innovación, el desarrollo tecnológico y la investigación, es la importancia del fomentar las habilidades blandas de los estudiantes para formar profesionales competentes que puedan desenvolverse y relacionarse en diferentes ámbitos, ambientes y contextos.
Uno de los objetivos más importantes en el que ha trabajado la universidad es la promoción de la cultura en regiones y la descentralización de esta. Es por eso que la institución cuenta con un patrimonio artístico de más de dos mil obras, además de que el campus ubicado en Talca cuenta con un Parque de las Esculturas, que reúne una parte importante de la creación artística de los mejores artistas chilenos de la segunda mitad del siglo XX. Además de lo anterior, existen siete salas de exposiciones, entre ellas uno de esculturas de pequeño formato y una dedicada a la obra de Lily Garafulic.
En conjunto con lo anterior, el involucramiento con las comunidades se ha vuelto un foco de trabajo importante. Es por eso, que se han formado iniciativas para lograr ser una universidad inserta en su territorio con la creación de clínicas abiertas a la comunidad, un jardín botánico, el desarrollo de medios de comunicación sobre la contingencia regional, entre otros.
Sobre los desafíos futuros, Álvaro Rojas señala que es necesario “generar espacios de inteligencia que permita traer desafíos y personas que hoy en día se sientan agobiadas en la Región Metropolitana. El rol de la inteligencia es esencial para aportar para el desarrollo. El rol de dar una solidez cultural a las regiones, no hay desarrollo sin cultura y también a quienes formen tengan las competencias para mantener ese desarrollo”. En este sentido, se espera que se siga fomentando el rol de las universidades estatales para el desarrollo de las regiones del país.